viernes, 11 de marzo de 2011

BREVE CRONICA DESDE TOKIO


Por Juan Carlos Villamizar A.

Son las 12 del día en Japon, acabo de llegar de darme una vuelta por la ciudad, una vez amaneció y después de una vigilia obligada por los temblores sucesivos, unos mas duros unos mas suaves pero todos igual de imponentes, cada cual salió en silencio hacia su destino. Yo no tenía uno fijo, me fui a ubicar lugares que creo es clave que tenga identificados, a entender un poco la ciudad y saber a donde queda cada cosa si hay alguna urgencia pero sobre todo a ver la gente y la ciudad en medio de ésta conmoción. Los Helicópteros pasan todo el tiempo transportando gente que pueden rescatar de entre los escombros, las emisiones continuas dan cuenta de lo que ya se sospechaba, que ha Japón se lo ha tragado el agua y no la tierra como todos pensaban.
Las imágenes que todos ustedes han podido ver hablan por si solas, sin embargo tiene un toque vertiginoso y dramático cuando ocurre como ayer minutos después del primer terremoto, y que con el edificio aun tambaleando nos pusimos frente al televisor para sr testigos de primera mano, en la imagen unas montañas de agua revotada y furiosa se dirigía desde el horizonte hacia la orilla, al costado inferior de la pantalla se veía la gente y los vehículos ajenos a lo que se les venía encima, la gente a mi alrededor se cogía la cabeza como si quisieran con ese esfuerzo sacar a esos, ya condenados, que aún caminaban sin rumbo y sin saber que ese muro de mar iba implacable a tomarse un trozo de tierra. Al final llegó, se veían como pequeños puntos desaparecer entre la masa, no vino sólo del mar, también desde el puerto y desde los canales con lo cual hubo un momento en el que las tres riadas descomunales se encontraron en un sembradío y lo  convirtieron en segundos en un amasijo de lodo, casas, barcos mercantiles, coches que parecían de juguete y más en el fondo la gente que ni se entero de lo que les había pasado. Entre tanto salíamos y entrábamos según la intensidad de los sismos, en minutos el país de los temblores supo que éste era diferente y sus caras de angustia reflejaba el momento de una cita ineludible, esto tenia que pasar algún día, y ese día fue ayer.
Ahora me han dado ganas de fumarme un cigarrillo y ver su humo sin más, parece lo menos nocivo de los elementos que están a nuestro alrededor, hace meses o incluso algunos años que no fumaba a medio día, ahora debo confesar que este, aquí y ahora sabe a gloria.
Puede ser acaso realidad que hayan camiones en las terrazas de edificios, barcos en la mitad de avenidas, un buque cisterna gigante clavado en medio de un paseo marítimo, las autopistas retorcidas y quebradas como si las hubiesen hecho de arcilla, ahora mismo veo la proa de un barco que se resiste a su hundimiento irrevocable, todo al revés, el mar se comió los coches y las ciudades las embarcaciones esa es la imagen de toda la isla, igual de sorprendente que las caras impasibles de los japoneses y japonesas que siguen viviendo su tragedia de la manera más digna posible.
Ahora el miedo se centra en otro lado, el gobierno ha confirmado que la posibilidad de escapes radioactivos de la central nuclear de Fukushima, a 350 kilómetros de Tokio, son reales, uno de sus reactores se ha recalentado y el sistema de enfriamiento por agua no esta operativo, ese es un efecto más devastador que el Tsunami, el fantasma de Chernovil aparece en escena y no es alarmismo, sólo repasemos la historia.
Sin embargo y con todo ello me quedaré hasta cuando tenía planificado, hasta el jueves próximo, la vida también se vive mirando su cara más sórdida y cruel, así sea a ésta mediana distancia, y creo que irse ahora sería un acto incompatible con mi forma de entender el frágil acto de estar vivos, no es valentía, nada más alejado de eso, es por el contrario el manejo pausado de la cobardía que me impide correr en estampida. Tampoco son convenientes los instintos solidarios que nos atacan y nos demandan ir a echar una mano, sin saber el idioma seríamos una torpe carga para los socorristas y voluntarios, además este pueblo milenario sabe más que nadie afrontar estas situaciones, si algo quiero hacer es observar y aprender, además de contar lo que va pasando.
Este es ahora uno de los lugares más idóneos para reflexionar, aunque no el único, éste mundo esta lleno de tragedias anónimas que se pierden porque sus protagonistas son menos relevantes o sino que lo digan los haitianos, allí se quedaron con sus muertos, con sus miserias, con los despojos que les dejo el caprichoso llamado de la madre tierra. 

3 comentarios:

  1. Juan Carlos, amigo. Acabo de abrir mi correo y lo primero que veo es éste enviado por la compañera Maria. Solo quiero decirte mi hermano que entiendo a la perfección tu posición y que la comparto, sé muy bién que no se trata de valentia ni protagonismo. Es simplemente una forma de encontrarnos a nosotros mismos y aprender de las dificultades. Un muy sincero abrazo.

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  2. Puede que no sepas el idioma, pero los japoneses en su mayoria hablan ingles asi que si lo hablas aun puedes ayudar, ahora si no sabes primeros auxilios ahi si es mejor no menterse de salvavidas porque como bien lo dices "puedes hacerse mas daño que ayuda", sin embargo segurametne a cualquier mano amiga ellos le daran la bienvenida, depronto ser voluntaro en labores que no sean de asistencia medica pueda ser muy util, y con lo bien que escribres, puede necesiten gente en los medios, uno no sabe, por ahora gracias por contarnos tu historia y darnos a entender un punto de vista de un sobreviviente....

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  3. por otro lado, no pienso que el caso de los haitianos sean "protagonistas menos relevantes", solo que Japon es la capital mundial de la ingeniera electronica, de las camaras de video y fotograficas, y ese es el motivo por el cual tenemos todas las imagenes de forma instantanea, grabadas, en su mayoria, por aficionados con SONY en sus manos, eso no sucedio ni en Indonesia 2004 ni en Haiti 2010, pero eso no quiere decir que ellos hayan sido o sedan menos relavsantes, ambos paises han estado en los corazones y mentes de miles de personas en el mundo,en el caso concreto de Haiti, miles de colombianos han ayudado a esa pobre nacion y la cruz roja colombiana ha hecho una excelente labor. Hay que dar el credito a quien lo merece. ;)

    http://www.elespectador.com/noticias/elmundo/articulo193984-colombia-envia-haiti-14-toneladas-de-ayuda-humanitaria

    http://www.taringa.net/posts/apuntes-y-monografias/4406198/Ayuda-Colombiana-a-Haiti.html

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